 |
| c. Pablo Lorente |
di Giovanni Zambito - Nata da un’intuizione condivisa tra Javier Carmena e Felipe Nieto nel 2010, El orgullo de quererte porta con sé l’ambizione di essere una zarzuela fedele alla tradizione ma radicata nel nostro tempo. La sfida, riuscita, è stata quella di rispettare le strutture classiche del genere senza rinunciare a un linguaggio scenico e musicale capace di raccontare l’oggi. Dopo il successo del debutto in forma di concerto nel 2022 ai Teatros del Canal con l’Orquesta y Coro de la Comunidad de Madrid, la produzione ha trovato una nuova vita scenica grazie alla regia di Albert Boadella e Martina Cabanas.
L’ambientazione nelle celebrazioni dell’Orgullo madrileno rende l’opera sorprendentemente attuale: la Plaza de Chueca diventa lo spazio simbolico dove memoria e presente si intrecciano, raccontati attraverso lo sguardo ironico e malinconico di P.J. (interpretato dal tenore Enrique Viana), personaggio glamour e malvagio al tempo stesso, che rievoca la perdita dell’amore di Alonso (il baritono Germán Olvera) come un viaggiatore nel tempo che scende e risale la “ciminiera” dei ricordi. Accanto a loro spicca la voce del tenore Santiago Ballerini (Tadeo), che con eleganza e sensibilità regala intensità drammatica a una delle linee narrative principali.
Musica e testo, con la loro naturale fluidità, non si limitano a ritrarre la movida e la parata arcobaleno, ma indagano sentimenti universali come il disincanto, la gelosia, la paura e soprattutto la libertà, rendendo questa zarzuela capace di parlare a un pubblico trasversale.
Il cast si distingue per intensità e bravura, con interpreti che hanno saputo restituire tanto il carattere brillante delle scene corali quanto la profondità delle arie solistiche. Alcuni numeri, per intensità emotiva e solidità musicale, possiedono già quella qualità che fa pensare a futuri classici del repertorio, destinati a essere ricordati ben oltre il contesto della loro prima esecuzione. Tra le sorprese più fresche e trascinanti spicca il Foxtrot de las Mariliendres, affidato al trio formato dal soprano Mari Cruz María Rey-Joly, dal soprano Mari Trini Mar Morán e dal mezzosoprano Mari Paz Andrea Rey, che con complicità scenica e brillantezza vocale hanno dato vita a uno dei momenti più applauditi della serata.
La regia di Boadella e Cabanas ha orchestrato con intelligenza i numerosi momenti collettivi, ricreando con realismo e ironia l’atmosfera di una parata, la vitalità della movida e persino l’energia convulsa della metropolitana madrilena. È proprio nei quadri corali che lo spettacolo raggiunge la sua piena potenza visiva, bilanciando la dimensione festosa con i risvolti intimi della vicenda.
 |
| c. Pablo Lorente |
Sul versante musicale, la direzione di Alondra de la Parra ha saputo mantenere un perfetto equilibrio: l’Orquesta y Coro de la Comunidad de Madrid ha sostenuto i cantanti con chiarezza e dinamiche ben calibrate, senza mai sovrastare le voci, contribuendo a creare una tessitura sonora viva e coerente. La coreografia di Sara Cano e le scene firmate da Ricardo Sánchez Cuerda hanno ulteriormente arricchito la narrazione, fondendo movimento e ambientazione in un quadro unitario.
Se l’impianto generale convince per freschezza e coraggio, il finale lascia un’impressione leggermente più debole. Non tanto per l’esecuzione quanto per la drammaturgia: il testo e la storia sembravano promettere un epilogo di maggiore forza emotiva. Resta comunque un lavoro di grande valore, capace di aprire nuove strade per il futuro della zarzuela.
El orgullo de quererte è una proposta che unisce rispetto per la tradizione e sguardo contemporaneo. Una zarzuela che osa parlare il linguaggio del presente senza perdere il suo respiro popolare, e che conferma come il genere, lungi dall’essere un reliquario, possa ancora rinnovarsi e sorprendere.
c. Pablo Lorente
En Español
“El orgullo de quererte”: la zarzuela que habla en presente
Nacida de una feliz confluencia entre Javier Carmena y Felipe Nieto en 2010, El orgullo de quererte lleva consigo la ambición de ser una zarzuela fiel a la tradición pero enraizada en nuestro tiempo. El reto, logrado con acierto, ha sido respetar las estructuras clásicas del género sin renunciar a un lenguaje escénico y musical capaz de narrar el hoy. Tras el éxito del estreno en versión de concierto en 2022 en los Teatros del Canal con la Orquesta y Coro de la Comunidad de Madrid, la producción ha encontrado nueva vida escénica gracias a la dirección de Albert Boadella y Martina Cabanas.
La ambientación en las celebraciones del Orgullo madrileño hace que la obra resulte sorprendentemente actual: la Plaza de Chueca se convierte en el espacio simbólico donde memoria y presente se entrelazan, narrados a través de la mirada irónica y melancólica de P.J. (interpretado por el tenor Enrique Viana), personaje tan glamuroso como perverso, que evoca la pérdida del amor de Alonso (el barítono Germán Olvera) como un viajero en el tiempo que baja y sube por la “chimenea” de los recuerdos. A su lado destaca también la voz del tenor Santiago Ballerini (Tadeo), que con elegancia y sensibilidad aporta intensidad dramática a una de las líneas narrativas principales.
Música y texto, con su natural fluidez, no se limitan a retratar la movida y el desfile arcoíris, sino que indagan en sentimientos universales como el desengaño, los celos, el miedo y, sobre todo, la libertad, convirtiendo esta zarzuela en una obra capaz de hablar a un público transversal.
El elenco se distingue por su intensidad y bravura, con intérpretes que supieron restituir tanto el carácter brillante de las escenas corales como la hondura de las arias solistas. Algunos números, por su intensidad emotiva y solidez musical, poseen ya esa cualidad que hace pensar en futuros clásicos del repertorio, destinados a perdurar más allá de su contexto original. Entre las sorpresas más frescas y vibrantes destacó el Foxtrot de las Mariliendres, confiado al trío formado por la soprano Mari Cruz María Rey-Joly, la soprano Mari Trini Mar Morán y la mezzosoprano Mari Paz Andrea Rey, que con complicidad escénica y brillantez vocal dieron vida a uno de los momentos más aplaudidos de la velada.
La dirección escénica de Boadella y Cabanas orquestó con inteligencia los numerosos momentos colectivos, recreando con realismo e ironía la atmósfera de un desfile, la vitalidad de la movida e incluso la energía convulsa del metro madrileño. Es precisamente en los cuadros corales donde el espectáculo alcanza su plena potencia visual, equilibrando la dimensión festiva con los matices íntimos de la trama.
En el plano musical, la dirección de Alondra de la Parra supo mantener un perfecto equilibrio: la Orquesta y Coro de la Comunidad de Madrid sostuvo a los cantantes con claridad y dinámicas calibradas, sin jamás cubrir las voces, contribuyendo a crear una textura sonora viva y coherente. La coreografía de Sara Cano y la escenografía firmada por Ricardo Sánchez Cuerda enriquecieron aún más la narración, fundiendo movimiento y ambientación en un marco unitario.
Si el planteamiento general convence por su frescura y valentía, el final deja una impresión algo más débil. No tanto por la ejecución como por la dramaturgia: el texto y la historia parecían prometer un desenlace de mayor fuerza emotiva. Aun así, se trata de una obra de gran valor, capaz de abrir nuevas sendas para el futuro de la zarzuela.
El orgullo de quererte es una propuesta que une respeto por la tradición y mirada contemporánea. Una zarzuela que se atreve a hablar el lenguaje del presente sin perder su aliento popular, y que confirma que el género, lejos de ser un relicario, todavía puede renovarse y sorprender. Giovanni Zambito.
 |
| c. Pablo Lorente |
